
Hoy hemos desmontado las velas de un impresionante yate de 100 pies, una tarea que requiere precisión y coordinación. Cada maniobra fue realizada con cuidado para preservar su integridad, asegurándonos de que estén listas para su mantenimiento y óptimas para volver a navegar. Trabajos como este son un recordatorio de nuestra dedicación a cuidar hasta el más mínimo detalle en cada embarcación que pasa por nuestras manos.
Comments